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Debido a la cuarentena y las restricciones impuestas por la pandemia COVID-19, la gente ha notado la aparición de ratas en los vecindarios. La Asociación Británica de Control de Plagas (British Pest Control Association) dice que ha habido un aumento del 51% en la actividad de las ratas desde que comenzó la cuarentena.

Los edificios vacíos y las calles desiertas brindan una oportunidad ideal para que aparezcan ratas en la ciudad. Parecen cada vez más audaces a medida que la comida se vuelve cada vez más difícil de encontrar.

Aunque las ratas generalmente tienen miedo de los humanos, se les vio en lugares inusuales durante el día (se sabe que las ratas son animales nocturnos) y no parecían tener miedo de los humanos.

Los roedores transportan y transmiten enfermedades y pueden reproducirse a un ritmo alarmante si no se atienden. Las ratas están oficialmente asociadas con aproximadamente 55 agentes patógenos diferentes, pero para COVID-19, no ha habido informes de que sean portadores de este virus. Las ratas contaminan los alimentos e incluso pueden causar incendios e inundaciones debido a los dientes afilados.

Las ratas se adaptan extremadamente rápido al medio ambiente y son muy valientes. En Londres, las ratas viven principalmente en alcantarillas, y salen a la superficie cuando necesitan comida, agua o diversos materiales de anidación. Hasta hace poco, lo hacían de noche, pero ahora se están aventurando más cerca de los hogares de las personas.

Para evitar que las ratas entren a tu hogar, sella las áreas donde pueden ingresar, usa sustancias que mantengan a raya a los roedores (se pueden colocar en las esquinas del sótano, en las puertas, en los armarios), coloca trampas fuera de la casa. Si todavía encuentras una rata en la casa, llama a los profesionales.

Si deseas saber sobre la pandemia de coronavirus, consulta nuestro artículo sobre este tema: La evolución de la pandemia de coronavirus en Londres.

[Foto de Pixabay]